Situadas en el noreste del Tarn et Garonne, las gargantas del Aveyron son un auténtico cofre de bellezas arquitectónicas y geográficas. Entre Saint-Antonin Noble Val y Bruniquel, hay 15 km de paraíso para todos los que les gusta moverse, caminar, escalar…
En los alrededores de Saint-Antonin-Noble-Val, en el río Aveyron, el piragüismo es el deporte rey. Los más apurados necesitarán tres horas para realizar los 9 kilómetros de descenso. Varios clubes o asociaciones proponen este tipo de actividades. Para el pádel también hay disponibilidad.
Disfrute de estos paisajes escarpados, de esta naturaleza salvaje y preservada, salpicada de restos de castillos, como el de Bruniquel, clasificado como uno de los «pueblos más bellos de Francia», que parece fundirse con el acantilado. No se pierda Saint-Antonin Noble Val, con sus callejuelas, sus casas medievales y su colorido mercado, Caylus y su verde valle, la abadía de Beaulieu-en-Rouergue y su centro de arte contemporáneo.