Se nombra un pueblo por región, cada uno de los cuales oculta pequeños tesoros, paisajes impresionantes y un cierto encanto francés, donde los habitantes son los primeros embajadores de la belleza y la convivencia de cada pueblo.
Este año fue Auvillar, en Tarn-et-Garonne, que lució con orgullo los colores de Occitania.
Auvillar es la perla del Garona, que domina con orgullo, brillando bajo el sol del sur.
Auvillar, catalogado como uno de los Pueblos más Bonitos de Francia, es un sueño para sus visitantes desde hace varios siglos, y tiene todo el encanto de la Douce France cantada por Charles Trenet.
Paseando por sus calles empedradas, los visitantes caen en su encanto.